El Gobierno nacional anunció un nuevo incremento en el precio de los combustibles, que entra en vigor a partir de febrero.
Según una circular de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg), el precio del galón de gasolina aumentará $95, alcanzando un promedio nacional de $15.753. En el caso del Acpm, el incremento será de $38, situando su valor promedio en $10.461 por galón.
Las principales ciudades del país ya reflejan este ajuste en sus tarifas. Se espera que este incremento impacte en la inflación y en los costos de bienes y servicios que dependen del transporte de mercancías. Mientras tanto, gremios transportadores manifestaron su inconformidad y exigen medidas de mitigación por parte del Gobierno.
De acuerdo con los datos de los precios vigentes publicados por la Creg, Pasto será la ciudad con la gasolina más barata entre las 13 principales del país, con un precio promedio de $13.846 por galón. A esta le siguen Cúcuta, donde el costo será de $14.165, y Cartagena, con un precio de $15.789. En el cuarto y quinto lugar del ranking se encuentran Barranquilla y Bucaramanga, con valores promedio de $15.831 y $15.947, respectivamente.
Por otro lado, Villavicencio tendrá el combustible más costoso, con un precio promedio de $16.284 por galón, seguida de cerca por Cali, donde el galón alcanzará los $16.195.
En el tercer lugar se encuentra Bogotá, con un precio de $16.184, mientras que Manizales y Pereira completan el listado de las cinco ciudades con la gasolina más cara, con valores de $16.160 y $16.134, respectivamente.
Impacto a la economía
El aumento en los precios de los combustibles tiene profundas repercusiones en la economía local. Este ajuste eleva los costos de transporte tanto para empresas como para consumidores, lo que puede traducirse en un aumento en los precios de bienes y servicios.
- Aumento en los costos de transporte: el incremento en los precios de gasolina y diésel eleva los gastos operativos para empresas de transporte, lo que puede resultar en mayores tarifas para los consumidores y un aumento en el costo de bienes y servicios.
- Inflación en los precios de bienes y servicios: los mayores costos de transporte y producción pueden trasladarse a los precios de los productos y servicios, contribuyendo a un aumento general en la inflación.
- Impacto en el sector agropecuario: el encarecimiento del transporte afecta a los costos de distribución de productos agrícolas, lo que puede elevar los precios de alimentos frescos y procesados y reducir los márgenes de ganancia de los agricultores.
- Presión sobre los presupuestos familiares: las familias enfrentarán mayores gastos en transporte personal y calefacción, lo que puede obligarlas a ajustar su presupuesto y reducir el gasto en otras áreas esenciales.
- Repercusiones en el sector industrial: los sectores industriales que dependen de combustibles para su maquinaria y procesos productivos pueden enfrentar mayores costos operativos, afectando la competitividad y los precios de productos manufacturados.
- Impacto en el turismo y la movilidad: los costos más altos de transporte pueden desincentivar el turismo local y limitar la movilidad de los ciudadanos, afectando la economía local que depende de la actividad turística y del desplazamiento.
- Efectos en la economía local: el incremento en los precios de los combustibles puede tener un efecto en cadena en la economía local, influyendo en la actividad económica general y en la estabilidad financiera de negocios y consumidores.
Crédito: Infobae.