Miguel Ángel Osorno Rodríguez, de 34 años y natural de Cali, terminó en un centro carcelario. Natalia Henao Morales, de 26 y natural de Cartago, quedó libre. Los atraparon con un cargamento de éxtasis en Cerritos. Eran dos kilos y las llevaban en tres bolsas.
La mercancía estaba oculta en la caleta de un cilindro de gas vehicular. La sustancia incautada, según cálculos de la Policía, alcanzaba para producir cerca de 2.000 dosis de droga sintética.
El hallazgo se produjo en el kilómetro 24, jurisdicción de Belalcázar (Caldas). Al carro lo interceptaron en medio de un retén de la Seccional de Tránsito y Transporte de Risaralda.
Los uniformados, al inspeccionar el Chevrolet Spark en el que se movilizaban, detectaron irregularidades en el sistema de gas y, tras una revisión más detallada, encontraron la caleta con la droga.
La ruta y el destino
El vehículo cubría la ruta Medellín–Cartago, donde presuntamente esperaban distribuir la mercancía. El valor del cargamento ronda los 42 millones de pesos, lo que lo convierte en uno de los golpes más significativos de las últimas semanas en el corredor vial que conecta al Eje Cafetero con el Valle del Cauca.
Además del estupefaciente, incautaron el automóvil y dos teléfonos celulares que supuestamente utilizaron para coordinar la operación de transporte.
En las audiencias de control de garantías, el juez determinó que el hombre debía enfrentar medida de aseguramiento en centro carcelario, mientras que a la mujer le concedieron la libertad, al no encontrarse elementos suficientes en su contra.
Crédito: 360 Noticias.
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