Alas 5:00 de la mañana, decenas de adultos mayores hacen fila frente a las puertas de Discolmets, en Dosquebradas, la nueva IPS encargada de surtir los medicamentos de los afiliados de Nueva EPS en el Eje Cafetero. Sin embargo, sólo 30 personas al día logran una ficha.
Es el anhelado cupo para retirar los fármacos que cada uno necesita, una esperanza que muchas veces no llega. Por eso, la mayoría debe regresar a regresa a casa con las manos vacías, con la incertidumbre de cuándo recibirán los tratamientos que, en muchos casos, son vitales.
Rubén Darío Aguirre, a sus 75 años, es uno de los perjudicados. Padece cáncer de próstata, hipotiroidismo, gastritis e hipertensión arterial. Viaja cada mes a Oncólogos del Occidente para su quimioterapia y seguimiento.
“Gracias al doctor Hinestroza recibo puntual mi medicina, pero en Discolmets me exigen madrugar, permanecer horas en la calle y aun así me voy sin la medicina que necesito para vivir”, le contó a 360 Noticias.
Siempre los acompañan su esposa, Gloria Nubia García Agudelo (61 años), operada de tiroides y usuaria de fármacos para la tensión. También su suegra, Ana Delia Agudelo (84), con insuficiencia respiratoria, artrosis degenerativa, gastritis crónica e hipotiroidismo.
“A mis 84 años no merezco esta odisea diaria. Tomo cinco medicamentos distintos… ¿cómo voy a sobrevivir si no me los entregan?”, dice Ana Delia mientras muestra su cédula de identidad y los formularios de las medicinas pendientes.
El problema se originó a mediados de mayo, cuando, según Rubén, Audifarma dejó de surtir directamente los medicamentos de Nueva EPS y fue reemplazada por Discolmets.
La nueva operadora anunció un sistema de citas en línea, pero no habilitó suficientes espacios: sólo concede 30 fichas diarias para el retiro de todos los medicamentos pendientes de la región.
La consecuencia ahora se traduce en una acumulación mensual de cientos de recetas sin despachar y cientos de adultos mayores que, en la mayoría de los casos, s resignan a dejar sus tratamientos.
La Ley 100 de 1993 y la Resolución 1403 de 2007 establecen plazos máximos de 24 horas para surtir recetas a pacientes crónicos y de alto costo. En la práctica, miles de afiliados de Nueva EPS atraviesan semanas sin recibir tratamientos esenciales.